Durante el Congreso Iberoamericano de Productores de Seguros, el miembro del Consejo de Presidencia de AIDA Mundial, Luis Sandoval Olivares, analizó la evolución de la responsabilidad civil profesional en el corretaje de seguros en América Latina
Durante el Congreso Iberoamericano de Productores de Seguros, el miembro del Consejo de Presidencia de AIDA Mundial, Luis Sandoval Olivares, analizó la evolución de la responsabilidad civil profesional en el corretaje de seguros en América Latina. Destacó la importancia de reforzar la ética, la transparencia y la formación continua ante un marco regulatorio más estricto en países como Chile y Colombia
En un contexto de consumidores más informados y exigentes, Luis Sandoval Olivares sostuvo que el corredor de seguros dejó de ser un mero intermediario para transformarse en un asesor de confianza con crecientes obligaciones legales y éticas. Durante su exposición en el Congreso Iberoamericano de Productores de Seguros, señaló que “los tribunales y los reguladores están imponiendo sanciones más severas a quienes no cumplen con las normas de conducta o descuidan la asesoría al cliente”. Subrayó además que las legislaciones de Chile y Colombia establecen estándares de idoneidad, transparencia y responsabilidad, en línea con los principios de la Asociación Internacional de Supervisores de Seguros (IAIS) y la OCDE.
El especialista explicó que, tanto en Chile como en Colombia, los corredores deben acreditar conocimientos técnicos, cumplir con normas de conducta, transparentar sus comisiones y contratar pólizas obligatorias de responsabilidad civil profesional. “La ética no es letra muerta: en los juicios, los códigos de conducta son utilizados como referencia del estándar profesional”, advirtió. Como ejemplo, mencionó una reciente sanción en Chile por falta de transparencia y mala asesoría, que derivó en una multa de 440 mil dólares a una corredora. En su mensaje final, Sandoval Olivares instó a los intermediarios a fortalecer sus prácticas de compliance, documentar cada gestión y mantener una formación continua: “El seguro de responsabilidad civil no es un gasto, es una inversión en protección y confianza”.