Charles Taylor: Seguros embebidos , oportunidad de crecimiento

El mercado de los seguros embebidos está rompiendo paradigmas: recientes investigaciones proyectan que este modelo podría crecer a más de USD 70 mil millones.


El mercado de los seguros embebidos está rompiendo paradigmas: recientes investigaciones proyectan que este modelo podría crecer a más de USD 70 mil millones.



El mercado de los seguros embebidos (es decir, seguros integrados directamente en la experiencia de compra de productos y servicios) está rompiendo paradigmas: recientes investigaciones proyectan que este modelo podría crecer a más de USD 70 mil millones en primas para 2030.

Este crecimiento no es solo cuantitativo: las tasas de conversión de ofertas embebidas ya superan las de seguros ofrecidos por canales tradicionales, según un informe de la consultora BCG. Para las aseguradoras que parten de entornos tecnológicos convencionales, esto significa enfrentarse a una tensión estratégica: mantenerse competitivas sin dejar de operar sus sistemas legados.

La buena noticia es que no se trata necesariamente de reemplazar toda la arquitectura tecnológica. Lo que se necesita es una capa de orquestación inteligente que conecte lo antiguo con lo nuevo, gestione flujos en tiempo real, soporte APIs abiertas e incorpore agentes de IA como piezas operativas centrales. Desde underwriting dinámico hasta la atención de reclamos o emisión instantánea, estos agentes actúan como “cerebros digitales” que reducen latencias y costos operativos.

“Una aseguradora puede tener un core robusto y décadas de datos, pero si no puede exponer APIs flexibles o reaccionar en segundos a eventos contextuales, estará fuera de la competencia embebida”, afirma Gonzalo Geijo, Chief Commercial Officer de Charles Taylor. “Nuestros agentes de IA permiten inyectar capacidad inteligente sin cambiar por completo el legado, transformando sistemas rígidos en plataformas adaptables.”

Para capitalizar el auge del embebido, las aseguradoras deben comenzar por revisar la compatibilidad de sus sistemas, identificando qué componentes legados pueden integrarse mediante APIs y cuáles necesitan una modernización parcial. Sobre esa base, resulta clave incorporar una capa de middleware y orquestación que funcione como puente entre el core asegurador y los nuevos entornos digitales —ya sean marketplaces, aplicaciones o socios comerciales—, permitiendo además la intervención de agentes de IA que automaticen procesos y decisiones en tiempo real.

Este enfoque facilita avanzar de forma progresiva con casos de uso embebidos, desde seguros de dispositivos o garantías extendidas hasta coberturas paramétricas, con la posibilidad de monitorear y ajustar continuamente el rendimiento de cada implementación.

El desafío no es solo digitalizar, sino convertir la tecnología en un habilitador estratégico. En un mercado cada vez más integrado, las aseguradoras que logren conectar sus sistemas con los ecosistemas digitales serán las que conserven el control del cliente y del negocio. La clave está en contar con una arquitectura que orqueste los procesos y con la inteligencia —humana y artificial— capaz de hacerla evolucionar.